La situación actual del
Chelsea es , cuando menos, sorprendente. Su puesto en la
clasificación es incomprensible si tenemos en cuanta que la
plantilla no ha sufrido cambios respecto a la que conquistó el
título de la Premier League el curso pasado. Entonces, ¿donde
hay que buscar las causas del pobre bagaje actual?
Una posible explicación
podría radicar en un cansancio mental de unos jugadores que llevan
varios años al servicio de un técnico tan exigente como es Jose
Mourinho. No quiero decir que los futbolistas estén en contra de
su preparador o que le estén haciendo la cama. Simplemente que su
relación se ha desgastado.
No es la primera vez que
los equipos del de Setubal sufren un bajón tras un periodo triunfal,
aunque es cierto que en otras ocasiones el portugués ya no estaba en
el banquillo. Ocurrió en el Inter de Milán y también, en
cierta manera, en el Real Madrid.
Aunque una plantilla
profesional debería de estar al margen de estas situaciones, lo
cierto es que son humanos y que como tales sus situaciones personales
influyen en su rendimiento. Y si hablamos de prestaciones, la de
algunas piezas claves de los Blues es notoriamente inferior a
la de la temporada pasada.
Eden Hazard,
Jugador del Año en la Premier en la 2014/15 no parece ser el mismo
que capitanease a los suyos hace apenas unos meses. No encuentra su
sitio en el campo y está destacando por su nulo olfato goleador (0
goles en 22 encuentros oficiales a 8 de diciembre). Mourinho a
probado a situarle en banda, por detrás del punta e incluso de falso nueve y todavía no ha dado con la tecla.
Otro que tampoco está a
la altura es Diego Costa. El ariete hispano-brasileño ha
marcado 4 tantos en 18 partidos y ha sido suspendido por sus mala
conducta en el césped. Sus números son demoledores ya que sólo ha
sido capaz de marcar ante Maccabi Tel Aviv, West Bromwich,
Aston Villa y Norwich, conjuntos de un nivel inferior
al Chelsea.
A estos dos nombres se
podrían añadir otros como Nemanja Matic, Branislav
Ivanovic, Oscar o Cesc Fábregas, importantes en la consecución del título y cuyo bajo rendimiento está
influyendo, y de que manera, en la trayectoria de un conjunto que
seguramente irá hacia arriba pero que, de momento, ve lejano ese
punto de inflexión que devuelva a los de Stamford Bridge a su
lugar en la Premier League. ¿Tal vez en Navidades? Y en la
Champions League, ¿Qué ocurrirá?
No hay comentarios:
Publicar un comentario