¿Ha vuelto la Serie A?

La liga italiana ha pasado unos años muy complicados y de un tiempo a esta parte la Serie A se ha visto relegada como la principal competición del viejo continente. Lejos quedan ya los dorados años 90, cuando las principales estrellas mundiales querían jugar en Italia. Hoy en día parece que esta tendencia esta tocando a su fin. No es que la situación económica del país sea tan boyante como antaño pero al menos parece que el campeonato está recuperando el brillo que había perdido.

Los grandes conjuntos transalpinos parece que vuelven a la palestra. La Juventus, tras su periplo en Serie B, lleva dos campeonatos consecutivos y es el rival a batir. El Inter de Milán después de una temporada sin ideas y llena de confusión, parece que de la mano de Walter Mazzarri ya sabe lo que quiere y se apunta a estar delante. La Roma, que en Italia si es grande, está sorprendiendo de la mano de Rudi Garcia y el Nápoles, con Benítez al frente parece que quiere dar un paso más y ser un serio aspirante al título.

En esta lista más de uno echará en falta al Milan. Los rossoneri atraviesan una crisis institucional, a la par que deportiva. El curso pasado consiguió la clasificación para la Champions League sobre la bocina y gracias en gran medida al empujón que supuso, tanto en el juego como en lo anímico, la llegada de Mario Balotelli en enero.

Esta temporada las cosas han comenzado igual de mal en San Siro y para más inri, el rival ciudadano parece haber encontrado la senda adecuada. A nivel institucional el problema parece alcanzar al hasta ahora intocable Adriano Galliani, y el futuro no es halagüeño.

Pero volvamos a la cara amable de la Serie A. La Roma ha comenzado la temporada a un ritmo tremendo y ha batido el récord de partidos ganados de forma consecutiva al inicio de una campaña. Las 10 victorias marcan un hito difícilmente superable. Rudi Garcia, como ya hiciera con el Lille campeón ha dotado a su equipo de una personalidad y de un hambre que no poseía e incluso el incombustible Francesco Totti (muchos se confundieron al retirarle) parece estar disfrutando, una vez más, de una nueva juventud.

Rudi Garcia y Franceso Totti
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El Nápoles se sitúa como segundo de la mano de Rafa Benitez. El técnico madrileño ha reforzado el conjunto partenopeo con jugadores a los que conoce bien y no está añorando al goleador Edinson Cavani, traspasado al PSG. La garra del Pipita Higuaín ha conectado a la perfección con la afición y Marek Hamsik parece haber dado el paso adelante que más de uno le exigía para meterse entre los más grandes del calcio. Grandes secundarios adornan el pastel en el sur de Italia.

Hamsik, Higuain y Zuñiga
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El tercero en discordia es la Vecchia Signora. El equipo de Antonio Conte parece haber perdido la frescura y el juego de las últimas temporadas y es evidente que para Andrea Pirlo no pasan los años. El objetivo del técnico juventino debe ser mantener la ambición de un plantel que ha ganado arrollando.

Inter, Fiorentina, el siempre combativo Lazio o el, de momento denostado, Milán, son los otros conjuntos llamados a pelear por los puestos que dan acceso a competición europea, pero me gustaría reseñar el papel de un recién ascendido como el Hellas Verona.

Luca Toni, alma mater del renacido Hellas
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El histórico conjunto ha permanecido alejado del primer plano futbolístico durante demasiado tiempo. Esta temporada está cuajando un inicio de campaña espectacular y es sin dudas el equipo revelación. En los últimos tiempos no ha existido en Italia un equipo modesto que hiciese soñar, no solo a sus aficionados, sino a los del resto del país con llegar a tutear a los grandes.

Uno de los ingredientes en la recuperación del fútbol italiano debe ser rescatar la ilusión de los aficionados por un deporte que en los últimos tiempos ha vivido más sombras que otra cosa.

Es evidente que a la Serie A todavía le queda mucho para volver a alcanzar el nivel que llegó a tener, pero la primera piedra de ese camino puede estar poniéndose ahora mismo. Lo primordial es lograr que el campeonato vuelva a ser atractivo para el público local. Lo demás llegará si se continúa trabajando. El camino a recorrer es largo pero el premio bien merece la pena.

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